Durante la ejecución del curso En-Línea de La Realización Exitosa de la Cena con el Quiropráctico, ha surgido una constante idea de parte de los inscritos.
Muchos, al comenzar a organizarse para llevar a cabo la cena con sus pacientes, instintivamente piensan en invitar principalmente, a los pacientes más establecidos y apreciados de la práctica. Aunque esto es un gran gesto humano, para efectos del éxito de La Cena puede ser una pobre decisión.
Al evaluar a quién invitar a La Cena, hay que tomar en consideración que además de esta ser un evento de apreciación de pacientes, es principalmente una actividad de concientización pública y de atracción de pacientes nuevos para su práctica.
Al considerar invitar sólo a los pacientes más establecidos y apreciados debemos mantener los siguientes puntos en mente:
1. Por regla general los mencionados pacientes componen sólo un 20% de la población de su práctica. Si invitamos solamente a estos, inmediatamente podemos crear una situación donde llegan muy pocos participantes a La Cena. El éxito de este tipo de evento depende en gran parte del efecto de grupo que se logra teniendo el número justo de personas presente.
2. Por definición los pacientes más establecidos en su práctica llevan mucho tiempo siendo atendidos, por lo tanto, es muy posible que ya hayan referido a la mayoría de sus familiares y amigos a su práctica. Cuando a estos pacientes se le pide que inviten a otros a la cena que no sean pacientes quiroprácticos, son pocos los que van a poder invitar. De otra parte, los pacientes que no son tan apreciados o llevan poco tiempo bajo cuidado tienen un alto potencial de poder invitar más personas al evento.
3. Los pacientes ya establecidos por tiempo en la oficina, por lo general vienen poco a atenderse, tal vez una vez cada dos semanas o una vez al mes. Por esta razón, si esperamos a que estos pacientes pasen por la oficina para invitarles, y no todos responden a la invitación, podemos encontrarnos a días del evento sin suficientes personas invitadas para asegurar el éxito promocional del La Cena.
Por lo anterior, recomendamos que, al coordinar La Cena para su oficina, no juzgue a quien invitar y simplemente invite a todos sus pacientes. En el peor/mejor de los casos a días de La Cena, tendrá demasiadas personas invitadas y tiene que decirles a algunos pacientes que La Cena se llenó.
Claro está es una mejor posición para encontrarse, que con muy pocas personas en las listas.
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