El año 2017 fluía naturalmente, con gran crecimiento en nuestra práctica privada:
Trabajaron con nosotros dos nuevos Doctores Asociados de manera exitosa.
Logramos integrar el “Lunch & Learn” a nuestras promociones, atrayendo no menos de 10 Pacientes Nuevos por evento.
El Departamento de Promociones de la oficina estaba generando más Pacientes Nuevos que en ningún otro año.
Nos acercamos al 95% de los Pacientes Nuevos eligiendo Sistema de Pago Congruente para cubrir los costos de su cuidado.
De igual manera fue un año de gran desarrollo para nuestros clientes de los distintos programas de consultoría de QuiroHub:
Clientes estaban alcanzando niveles de volumen los cuales requería la contratación de doctores adicionales.
Los clientes del Programa de Oratoria estaban logrando educar y transformar la salud de cientos de personas con sus orientaciones.
Los clientes establecidos del Programa de Alcance Comunitario (Programa CAC) estaban viendo los frutos de esta vital pieza de su equipo.
Los nuevos clientes del Programa CAC habían contratado personas claves para la posición de las promociones en su oficina, e iniciaban su proceso de adiestramiento y supervisión con QuiroHub.
En fin, el 2017 se perfilaba hasta el mes de septiembre, cómo un gran año de desarrollo y alcance profesional.
En ese mes Puerto Rico fue visitado por el huracán Irma el cual causó devastación a lo largo de varias islas del Caribe. Causó también daños significativos en Puerto Rico, nada comparado con los sufridos en nuestras islas hermanas.
Corto tiempo después llega María, huracán de Categoría 5 el cual causó devastación a lo largo y ancho de nuestra isla. Uno de los huracanes más poderosos y devastadores en tiempos modernos.
Al cesar los vientos pudimos salir de nuestra casa a evaluar los daños a la propiedad. Fuimos muy afortunados, ya que nuestro hogar no sofrió daño mayor. Una vez tranquilos con el estado de la casa, y sabiendo que nuestros familiares, amigos, y vecinos estaban bien, comenzamos a pensar en la oficina, ¿qué sería de esta?
La falta de mecanismos de comunicación no permitía que algún vecino nos pudiera informar sobre la situación de la oficina. Recuerdo la angustia de no saber el estado físico de esta, ahora desarrollada por 23 años; nos tomó varios días poder llegar a examinarla.
Ya cuando se podía transitar de manera limitada las vías del área metropolitana, pudimos salir del sector de nuestra vivienda para inspeccionar la oficina. Lo que vimos desde el auto en el área de Guaynabo y San Juan fue aterrador.
El tendido eléctrico estaba devastado; no decenas, si no
cientos de postes eléctricos estaban en el piso. Los daños a la propiedad, inimaginables; todas las casas y edificios, de una manera u otra, severamente afectados. Tal vez lo más que me impactó, algo que nunca imaginé, fue el daño a la bella y exuberante vegetación de nuestra isla.
La única manera en que sé describirle al lector que vive fuera de Puerto Rico el estado de la vegetación tras el paso del huracán, es el decir que parecía que le habían pegado fuego, si, fuego.
Pero no fuego a un área, me refiero a que parecía que le habían pegado fuego a 100% de la vegetación de la isla, dejando tras este sólo algunos troncos, y varias de las ramas de los árboles que quedaban de pie.
Al ver el estado de la vegetación, me vino a la mente nuestra oficina, y sentí cómo si alguien me hubiera echado un balde de agua fría por la espalda: “si así está la vegetación, ¿cómo estará nuestra práctica?”
Mientras escribo este Blog Post, tengo “piel de gallina” al recordar vívidamente ese momento.
Al llegar a la oficina, tuve un momento de tranquilidad y aliento, al descubrir que la planta física estaba intacta y saber que todavía teníamos un lugar donde servir a nuestros pacientes.
Una vez evaluada la planta física de la oficina, llegó la segunda ola de preocupantes pensamientos.
Al igual que la vegetación de la isla, desprovista de la mayoría de sus ramas, y todas sus hojas, igual estaba la oficina desprovista de, electricidad, agua, vías de rodaje accesibles, y mecanismos para poder comunicarnos con nuestros pacientes.
¡Qué dura realidad!
Ya en al auto de regreso a la casa, empecé a darme cuenta de las interminables toneladas de desperdicios vegetales y sólidos, generadas por el paso de María.
Al pensar en la monstruosa labor que sería el recoger y disponer de estos desperdicios, comencé a darme cuenta de cuán difícil iba a ser el rescatar nuestra práctica, y la de nuestros clientes.
Nunca me imaginé a qué nos enfrentábamos profesionalmente…
En el primer día de atención a pacientes en nuestra oficina, vimos solo un paciente. Poco a poco, e implementando el plan de acción de Iniciativa Quiropráctica logramos encaminarnos en regresar a la normalidad de práctica. Todo esto sin servicio eléctrico, internet, y muy poca señal de teléfono celular. De igual manera, varios de nuestros clientes y colegas asociados a Iniciativa Quiropráctica lograron reponer en corto tiempo su volumen de servicio alcanzado antes de María, esa no fue la suerte de muchos otros.
Tristemente hubo colegas / amigos cuyas oficinas sufrieron total destrucción, quienes ahora tendrían que empezar de cero.
Otros, paralizados por la experiencia del huracán, simplemente permanecieron “sentados” sin hacer mucho por la restauración de sus prácticas, o llegar a sus pacientes. Hace apenas unos días un colega me dijo con total naturalidad:
“Yo voy a esperar a febrero pa’ meterle mano a la práctica.”
Imagínese, dejar caer su práctica por 5 meses, antes de comenzar a rescatarla...
A pesar de la restauración de volumen de servicio en nuestra práctica, las de nuestros clientes, y colegas asociados, todavía quedan tiempos bien difíciles por ser superados.
Recientemente en una conversación con una persona muy allegada al mundo de los seguros de propiedad y salud en Puerto Rico, este pronosticó, que el gigantesco volumen de reclamaciones de seguros de propiedad va a afectar directamente los pagos de los seguros de salud en aquellas compañías que manejan ambas carteras de seguros de propiedad y de salud (Triple-S y Mapfre) en la isla.
Preocupantemente, una de estas compañías maneja cerca del 75% de los pagos por servicios Quiroprácticos en la isla.
Conociendo la dependencia de ingreso de planes médicos de muchas prácticas quiroprácticas locales, de este pronóstico ser acertado, el efecto será el equivalente para la profesión, que María para la vegetación isla.
Ya han pasado meses desde paso del huracán por Puerto Rico, y ya es evidente el resurgir de nuestra bella flora, es claro que ahora va a crecer más linda y fuerte que nunca.
Cómo Quiroprácticos sabemos existe un orden natural regido por la Inteligencia Universal, el cual se manifiesta dentro de todo ser viviente en la forma de su Inteligencia Innata, la cual se ocupa de mantener al ser, vivo y saludable. Este elemento de nuestra filosofía Quiropráctica es evidente al observar el resurgir de la vegetación de nuestra amada isla en el día de hoy, y nunca la debemos olvidar…
De igual manera que celebramos el resurgir de la vegetación en la isla, podemos celebrar que nuestra práctica, al igual que la de nuestros clientes, y muchos colegas locales, va a estar igual, y posiblemente mejor que antes del paso de María.
Así podemos iniciar un nuevo año llenos de confianza y energía para seguir restaurando, y manteniendo la salud de nuestra gente.
Al visitar nuestra oficina recientemente, tuve una espectacular sorpresa: Todos los pacientes que estaban en el área de recepción, 12 aproximadamente, son pacientes de nuestra práctica por más de 15 años.
Experimenté la sensación de gratitud profesional más grande de mis 23 años de práctica.
Posiblemente, gracias a María he podido sentir una de las sensaciones más satisfactorias que todo Quiropráctico puede experimentar en su vida de servicio, pensé que mi práctica era:
“A Prueba de Huracanes”
Claro, todos sabemos que no hay tal cosa.
Luego de salir de la oficina me detuve a ponderar:
¿Cuál es el elemento común que asociaba a cada uno de los pacientes que vi en la sala de recepción?
Comparto con el lector lo que pude identificar...
Todos estos pacientes:
Habían asistido a una orientación formal sobre el cuidado quiropráctico, en el cual se le presento la realidad vitalista de nuestra filosofía.
Sus parejas e hijos son pacientes en nuestra oficina.
Habían sido educados quiroprácticamente con nuestro sistema de Educación Visita a Visita.
Cubrían el costo de su cuidado mediante nuestro mecanismo de pago congruente.
La mayoría de ellos cubren el costo de sus servicios con fondos privados.
Tienen sus citas para todo el año programadas
Son pacientes que refieren continuamente a sus familiares, conocidos, y amigos a nuestra práctica.
Invito al elector a revisar los puntos anteriores, y considerar, cuál(es) de estos elementos pueden ser implementados en su práctica en el 2018 para elevar el nivel de valor de sus pacientes por sus servicios, y la solidez de su práctica.
A inicios del 2018 QuiroHub ofrecerá su transformacional evento: Creando Soporte, en este se cubrirán de manera específica los elementos antes mencionados, y su inmediata implementación, para detalles active el enlace:
En QuiroHub nos reiteramos al servicio de su desarrollo profesional, y le deseo gran y continuo desarrollo durante el 2018 y los años por venir, nuestra gente nos necesita, y cada día más.